lunes, 10 de diciembre de 2012

Caos en Cinépolis por no transmitir el box


El plan parecía el ideal para cientos de personas que querían ver la cuarta pelea entreManny Pacquiao y Juan Manuel Márquez de una forma más espectacular. La cadena mexicana, Cinépolis ofrecía la última gran batalla del año en la pantalla grande por un precio de 99 pesos. Para muchos, resultó ser la mejor opción, ya que además, la pelea iba a ser transmitida en vivo, y no se tendrían que esperar a la señal por televisión abierta para conocer el resultado.
Las salas de Cinépolis a lo largo del país se llenaron en su gran mayoría. En el caso específico de algunas, como en Plaza Universidad de la Ciudad de México, en las cuatro salas en que se ofrecía la pelea, presentaban un lleno absoluto. En Cinépolis Galerías de Guadalajara, más de 400 espectadores esperaban con emoción el inicio de la batalla.
La transmisión inició a las 20 horas en los diferentes complejos a lo largo del país. Pasaron las cuatro peleas preliminares hasta que dieron las 23 horas. Los aficionados todavía pudieron entonar el Himno Nacional de México, y cuando los peleadores se disponían a ingresar al ring, la señal se cayó.

Y KE SE KEDAN KON LAS GANAS DE VER LA PELEA....

En Cinépolis Galerías de Guadalajara, se proyectó un mensaje en el que decía que no se había pagado por el evento, mismo que quitaron de inmediato. ”En el transcurso de la trasmisión se presentó un mensaje que decía que era ilícita la presentación de ellos”, dijo uno de los asistentes inconformes en declaraciones para Cancha.
Por unos momentos, las personas aguardaron dentro de la sala en espera a que la transmisión pudiera reiniciar. No pasó mucho tiempo para que la desesperación y el enojo fueran mayores y comenzaran los reclamos pidiendo el regreso del dinero no solo de su entrada, sino de todo lo que habían consumido y hasta por el pago del boleto de estacionamiento.


“Cinépolis está ganando gracias a un robo, pero está ganando no sólo las entradas, está ganando todo lo que consumimos, el estacionamiento, todo lo que pagamos no le pierden, realmente fue negocio para ellos”, comentó otro de los espectadores afectados por la transmisión.
Aficionados enojados e incluso algunos llegando casi a la violencia, exigieron el regreso de su dinero. Al final, con menos de un tercio de los espectadores en la mayoría de las salas, se pasó la pelea diferida por televisión abierta, pero también siguió teniendo fallas de transmisión.
Aquellos espectadores que se quedaron hasta el final de la transmisión, recibieron a cambio un vale por cuatro entradas al cine. Pero el enojo y el trago amargo, nadie se los pudo quitar, ni siquiera la victoria de Juan Manuel Márquez.
Cinépolis no ha emitido una sola palabra al respecto, ni siquiera sus empleados, quienes justificaron ante la prensa que ellos no estaban autorizados para hablar.

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